Se han intervenido 866 kilos de pescado en la provincia de Zaragoza, que había sido declarado no apto para el consumo humano por las autoridades sanitarias.
En octubre, el SEPRONA llevó a cabo el primer registro pero no facilitó esta información para poder seguir avanzando en las detenciones de los integrantes de la organización. En total, en la operación Glanis, se han imputado a 19 personas implicadas en estas prácticas ilegales y peligrosas para la salud de los consumidores.
El protocolo de actuación de la banda consistía en realizar la pesca furtiva por la noche en zonas de difícil acceso, principalmente a lo largo de la extensión del embalse de Mequinenza.
El pescado intervenido en esta operación, fundamentalmente carpas y siluros, ha sido destruido tras ser declarado no apto para el consumo humano por las autoridades sanitarias. Las operaciones para el acondicionamiento y comercialización de la mercancía, incumplían con las prácticas higiénicas de manipulación que deben realizarse en arreglo al Reglamento (CE) nº853/2004 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 29 de abril de 2004, por el que se establecen normas específicas de higiene de los alimentos de origen animal.